El sueño mundialista de la Selección Argentina de Vóley llegó a su fin en Filipinas, tras caer 3-0 ante Italia en los octavos de final. Los parciales fueron de 23-25, 20-25 y 22-25 en un encuentro disputado en el Mall of Asia Arena de Pásay. Luciano Vicentín fue el máximo anotador argentino con 15 puntos.
Este partido marcó también el final del ciclo de Marcelo Méndez como entrenador del seleccionado argentino. Méndez, quien asumió en 2018 en reemplazo de Julio Velasco, deja el cargo luego de una etapa exitosa que tuvo su punto culminante con la obtención de la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 (disputados en 2021).
Argentina había clasificado a octavos de final tras una fase de grupos destacada, donde logró victorias sobre Finlandia (3-2), Corea del Sur (3-1) y, de manera sorprendente, ante Francia (3-2), los bicampeones olímpicos. Este último triunfo, definido en un dramático tie break con parciales de 28-26, 25-23, 21-25, 20-25 y 15-12, no solo le dio la clasificación al equipo albiceleste sino que también significó la eliminación de Francia, una de las grandes sorpresas del torneo.
Italia, por su parte, avanzó a cuartos de final donde se enfrentará al ganador del cruce entre Bélgica y Finlandia. Los italianos, defensores del título, buscan revalidar su corona en este Mundial.
El Legado de Marcelo Méndez
La salida de Marcelo Méndez marca el final de una era para el vóley argentino. Bajo su dirección, la selección logró hitos importantes, siendo la medalla de bronce en Tokio el logro más destacado. Su capacidad para potenciar el talento individual y construir un equipo competitivo dejó una huella imborrable en el vóley nacional.
Próximos Desafíos
Ahora, la Federación Argentina de Vóley deberá buscar un nuevo entrenador que pueda continuar el legado de Méndez y llevar al equipo a nuevos éxitos. El desafío será mantener la competitividad del seleccionado y seguir desarrollando jóvenes talentos que puedan nutrir al equipo en el futuro.