Las elecciones en Misiones dejaron como principal titular la revalidación del poder de Carlos Rovira y el Frente Renovador de la Concordia, aunque marcadas por un notorio ausentismo y una fragmentación del voto opositor. El oficialismo, liderado por Sebastián Macías, se alzó con el 28.6% de los votos, consolidando su hegemonía en la provincia.
Baja Participación y Ascenso de la Libertad Avanza
Uno de los datos más relevantes de la jornada electoral fue la escasa participación ciudadana, con solo un 57% del padrón emitiendo su voto. Este fenómeno refleja un creciente desinterés en la política tradicional, especialmente en zonas como San Pedro, afectadas por la crisis del sector yerbatero. La Libertad Avanza, en su primera incursión electoral con sello propio, se posicionó como la segunda fuerza más votada, obteniendo un 21.9% de los sufragios.
Otros Actores y el Contexto Político
Más allá de los dos principales contendientes, la elección también dejó espacio para figuras como Ramón Amarilla, un expolicía detenido que logró una banca desde la cárcel, y el Partido Agrario y Social (PAyS). Sin embargo, la dispersión del voto opositor favoreció al oficialismo, que a pesar de su victoria, no celebró con la euforia habitual.
El resultado de las elecciones en Misiones también pone de manifiesto el impacto a nivel local de la gestión del gobierno nacional. La performance del oficialismo misionero se vio afectada por el arrastre negativo de las políticas nacionales, lo que se tradujo en una pérdida de puntos porcentuales en comparación con elecciones anteriores.
En resumen, las elecciones en Misiones consolidaron el poder de Rovira en un contexto de apatía ciudadana y fragmentación de la oposición, mientras que el auge de la Libertad Avanza señala un cambio en el panorama político provincial.