Columbus Crew corta racha invicta de Vancouver Whitecaps

Después de dos meses y once partidos sin conocer la derrota en la MLS, la buena racha de los Vancouver Whitecaps llegó a su fin. Un equipo de Whitecaps diezmado cayó ante un Columbus Crew también con bajas, por un marcador de 2-1. Esta fue la primera derrota de los Whitecaps como visitantes en la MLS desde su eliminación de los playoffs contra LAFC la temporada pasada.

El partido, si bien se jugó con intensidad, careció de momentos memorables, más allá de los goles. Ninguno de los dos equipos generó una gran cantidad de ocasiones claras de gol (o al menos, no unas que estuvieran en posición legal). La diferencia final se debió a un error inusual de Tristan Blackmon y a la falta de energía de los Whitecaps para conseguir un segundo gol.

La ausencia de Berhalter: clave en la derrota

¿Por qué los Whitecaps no tuvieron la fuerza necesaria para marcar un segundo gol? La ausencia de Sebastian Berhalter, especialmente en la progresión del balón, fue un factor determinante. Los Whitecaps alinearon a un doble pivote formado por Ralph Priso y Andrés Cubas, dos jugadores muy buenos recuperando balones, pero con limitaciones para hacer avanzar el juego. Cuando Berhalter o Pedro Vite juegan más retrasados, esto no supone un problema, ya que los recuperadores pueden delegar la mayor parte de la progresión en ellos. Pero con Priso y Cubas en el centro del campo, el balón no llegó con la frecuencia necesaria al último tercio del campo.

Problemas en el ataque

Otro efecto de las ausencias fue la presencia de Vite y J.C. Ngando (quien anotó su primer gol con los Whitecaps) en posiciones más adelantadas. Estos son dos jugadores cuya principal fortaleza es la progresión del balón, pero ninguno de ellos es un gran peligro de gol. Por lo tanto, también hubo una falta de mordiente en el último tercio del campo.

A pesar de todo, es comprensible la situación de Jesper Sørensen, entrenador del equipo. Alinear al equipo de esta manera era prácticamente la única opción con los jugadores disponibles, a menos que quisiera alinear a un jugador de 17 años del WFC2. Ocho ausencias son difíciles de superar para cualquier equipo, pero son especialmente duras para los Whitecaps, que solo tienen 17 jugadores en su plantilla principal.

Compartir artículo